Tener un moodboard permite tener una visión clara de la identidad visual y de las estrategias de comunicacional de tu empresa. Para un emprendedor es una herramienta indispensable, especialmente si se tiene una tienda online, ya que es la base para diseñar la identidad gráfica de una marca.
Colores, siluetas, tipografías, texturas, palabras y otras referencias pueden formar parte de tu moodboard, y te pueden servir para mejorar todos los aspectos gráficos de tu emprendimiento. ¿Ya tienes uno o necesitas ayuda?
Existen varios consejos que puedes tomar en cuenta a la hora de crear tu propio moodboard, por eso, en ese post queremos compartiremos algunas claves que te ayudarán a crear el tuyo o a mejorar el que ya tienes para tu marca.
¿Qué es un moodboard y para qué sirve?
Un moodboard es un tablero de inspiración en donde colocar todas esas ideas, fragmentos, imágenes y elementos artísticos variados que te permitan comprender o explicar mejor la estética de tu marca. Es una herramienta creativa que tributa a tu estrategia de marketing. Suma y provee de referencias para entender mejor el aspecto que tu negocio quiere mostrar, es decir, su identidad.
Por supuesto, con estética nos referimos a toda esa cohesión comunicacional que tu marca brinda al ser vista. Por ejemplo, cuando vemos en un feed de Instagram en el que todas las publicaciones parecen llevar un mismo color o una personalidad unificada. Imagina una marca de maquillaje que en todas sus fotos predomine el color rosa. Eso inmediatamente nos lleva a una energía probablemente suave y femenina por las connotaciones del color.
El moodboard es importante para lograr tu posicionamiento porque a la larga será de allí de donde nazcan las características que harán a tu marca única, y por tanto, memorable.
¿Cómo hacer un moodboard?
No cualquier persona sabe cómo hacer un moodboard, ya que se requieren conocimiento sobre diseño, y hace falta tener habilidades para evaluar el contenido que puede servir.
Si te preguntas cómo hacer un moodboard, te recomendamos seguir los pasos que te dejamos a continuación.
1: Definición del mood
Empecemos por el paso inicial que es definir la palabra clave o mood de tu marca. Recuerda que la idea de tener un moodboard es encontrar la esencia visual y comunicativa de tu negocio. Esta palabra o frase de inicio conocida por muchos como «insight» es la raíz o el alma estética del que deriva la identidad de nuestra marca.
Realmente no es algo que dependa de tu negocio sino más bien de los gustos de tu buyer persona. Por ejemplo, puedes tener un negocio de respuestos de carros, pero si tu público objetivo son chicas jóvenes que estrenan su primer vehículo, puedes elegir un moodboard que provenga de la palabra chic o limpio, que vaya con unos colores blanco o rosa y que hable de manera jovial y ocurrente.
Quien define esa palabra o frase eres tú, pero lo que sí debes tomar en cuenta es que repercutirá en cómo es vista tu marca y por ello debes tomar en cuenta a tus clientes quienes son lo que verán tu marca cada vez que puedan. En resumen, que es fundamental que tu moodboard hable el idioma de tu público objetivo.
No debe ser una palabra complicada sino algo que te dé luces y traiga imágenes a tu cabeza de cómo puede verse todo. Puede ser vintage, café, tropical o juvenil. Puede venir de una frase como “al mal tiempo buena cara” o “la amistad es mi familia elegida”. Puede incluso venir de un animal, el “pingüino”, por ejemplo, trae elementos monocromáticos, románticos y elegantes por lo que no estaría mal para un perfume.
2: Lluvia de ideas
Para poder proseguir es importante buscar ideas y conceptos que queremos mantener como identidad de nuestra marca. Muchos se quedan en conceptos generales y no profundizan en la lluvia de ideas para sacarle el máximo provecho a tu creatividad. Esto es contraproducente porque se volvería muy plano tu moodboard.
La idea es que el moodboard muestre hasta dónde puede llegar visualmente tu marca y todo lo que puede explorar comunicacionalmente.
Podemos empezar con esa palabra clave o mood que mejor define la marca. Por ejemplo, una marca de zapatos cuya palabra clave es «hipster».
Si partimos de esa palabra podemos sacar muchísimas cosas de allí. Específicamente podemos elegir elementos (en este caso hipster podrían ser bufandas, lentes alternativos, madera, café, cuadros), colores (tonos color vino, mostaza terracota y marrón), y un estilo (en este caso vintage). Mientras más puedas sacar de cada una de las categorías mejor te irá en los siguiente pasos.
3: Búsqueda de imágenes y referencias artísticas
Ahora es momento de buscar esos elementos que colocaste en la lluvia de ideas en algún buscador de imágenes como Google o Pinterest. Cada elemento que colocaste lo encontrarás y descargarás la imagen como ejercicio y la meterás en una carpeta.
Si colocaste colores buscarás elementos que tengan el color en el tono que te lo imaginaste. Por ejemplo, un rosa atardecer, o quizás un rosa flamingo, y descargas dicha imagen para la carpeta.
Cualquier imagen que represente esa alma de tu marca y que contribuya al moodboard funciona. IMPORTANTE: No necesariamente tienen que ser solo imágenes. Pueden ser frases, obras de arte, canciones y cualquier elemento artístico que creas que representa a la marca. Una vez hayas recabado todos esos elementos y guardados en una carpeta podemos ir al paso final.
4: Crear el moodboard
¿Querías saber cómo hacer un moodboard? Este es el paso definitivo. De nada sirve haber hecho toda esa búsqueda, descarga e ideación si no podemos plasmarla en un sitio.
Por ello, puedes aprovechar Canva, Illustrator e incluso Powerpoint para agregar todos estos elementos de manera armónica y coherente en una página para que cada vez que alguien en mercadeo, diseño o ventas tenga que acceder a él pueda encontrar todo el “mood” de tu marca organizado y limpio en un lugar.
La manera en la que organices el moodboard es completamente personal, por lo que no debes juzgar tu manera de hacerlo.
Tener un moodboard ayuda muchísimo a la hora de crear la publicidad, logo y aspecto de tu negocio. Si tu moodboard es infantil y juguetón, no te funcionarán imágenes de carreras de carros ni colores oscuros.
Todos los elementos deben tener una coherencia clara para pertenecer a tu moodboard. Así, si te toca hacer un post de Instagram sabes qué colores o elementos usar y cuales no.
Cuando hagas una publicidad sabes qué cosas puedes decir y a qué imágenes puedes hacer alusión y a cuáles no. El moodboard es tu brújula creativa con la que emprender se hace mucho más sencillo. Así, si tienes una tienda digital por ejemplo en TiendaDA sabrás cómo deben lucir tus productos y la tienda en sí.
Recuerda que puedes usar tu tienda virtual en TiendaDA como página web para que los clientes tengan a donde llegar y puedas lograr esa venta que tanto deseas.
Usa tu moodboard en tu tienda online de TiendaDA
TiendaDA te ofrece varios recursos de personalización para que al momento de crear y mejorar tu tienda online puedas aprovechar al máximo todas las ideas que nacen de tu moodboard. En nuestra plataforma tu site puede ser único, tener su paleta de colores personalizada y su aspecto único. ¡Tienes todos las herramientas a la mano y son fáciles de usar!
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